

Estos alimentos, a menudo denominados súper alimentos
o alimentos de desintoxicación, por lo general no son lo que esperamos.
Aquí está uno que no es comúnmente conocido:
Las remolachas contienen una serie de sustancias
químicas a base de plantas naturales (fitoquímicos) que son raros, incluso en
otras verduras de color rojo, mientras que actúa como un antioxidante natural y
ayuda a estabilizar el pH sanguíneo.
La pectina, es un tipo de fibra que se encuentra en
muy pocos alimentos, que puede acelerar el proceso de desintoxicación. La
pectina se cree que se une a las toxinas y evita que se reabsorban en el
torrente sanguíneo.

Afortunadamente, hay muchas maneras de consumir estos
tubérculos. Pueden ser asadas, al horno, o rallados y ponerlos en las ensaladas
y otros platos.